Como beber vino dulce después
de comer avellanas
suaves, blancas,
así es el sabor de tu
piel, dulce, blanca,
embriagadora por tus ojos
negros…
¿Cómo esquivaré yo el
puñal del crimen
que pesa lento sobre mi
conciencia?
Y sin embargo mi inocencia pura
blanqueará mi nombre en
tus blancos oídos.
¿Qué satisfacción me
darán los tactos
de los demás cuerpos si
no te tengo?
¿Quién no echará de menos
aquel cuerpo
como el melocotón en el
verano?
Quiero recuperar tu
corazón,
para gozar de los besos
de tu piel.
Tu piel, ebriedad de mi
carne fría,
Me otorga el placer de la
remisión.
Mis manos te palparán
otra vez.
Mis ojos contemplarán tu
mirada.
Mi boca tendrá el sabor
de tu carne.
Mi alma bailará con tu
blanca esencial.
Todo será como un blanco
infinito,
blanco, blanco será mi
semen blanco,
blanco, blanco será el
color de mi alma,
blanco el vestigio final
de mi carne.
Un amor ha más blanco que
la espuma,
un amor de mis labios en
tus hombros,
un amor que trasciende
sobre el alba,
pues va anunciando su
propia mañana.
Tu carne sólo puede ser
un templo.
Un templo donde consagra
a tu alma,
como si fuera una imagen
divina,
santa, por los astros
iluminada.
¿Cómo se mana las
reliquias sagradas?
¿Tal vez cómo yo te amo
en la distancia?
En la distancia plácida
de abismos,
pensaré en ti como se
piensa en Dios…
Te cantan los ángeles,
luz del mundo,
creadora de cuanto bueno
hay en mí,
ideal más elevado que las
nubes,
(te canta un ángel con
luces del alba).
Mi voz rogará a tu pecho que escuche
la oración que se canta
en mis entrañas,
el pulso que mueve toda
mi sangre,
aquel estertor que exhala
mi espíritu.
Todo es tierno ladrido,
un banal eco,
que estalla desde las
cumbres oscuras.
Intento llamar tu
atención de noche,
sabiendo que pronto
estarás cansada.
Estarás cansada de mi
lamento,
me increparás pecados de
inocencia,
disipándome de tu vida
sacra,
como el alcohol se disipa
en la sangre…
No crec haver-lo copsat tot perquè té els seus fragments hermètics-i això no és cap mal-, però m'ha encantat i llegit en veu alta, no massa, guanya poder.
ResponderEliminarEndavant, Eduard!
Glòria, gràcies pels ànims i pel teu comentari. Aquest poema el vaig escriure per una circumstància privada. Per tant és lògic que alguna cosa quedi críptica suposo.
EliminarL'he canviat, perquè la persona a qui anava destinat m'ha demanat que ho faci. Vol ser-ne l'única lectora.